Casi real (10)

Alce la vista al escuchar varios disparos, algo en mi interior me decía que Eliot estaba cerca y todo el alboroto se debía a ellos. Un ruido en la puerta me hizo reaccionar, Joshua se acerco a mí sonriendo y quito la cadena de mi pie derecho. Acaricio mi rostro despacio mientras esbozaba una extraña sonrisa.

-es hora de irnos- Joshua…- tus amiguitos ya están aquí, cuando me encargue de eliminarlos nada se interpondrá en mis planes- detente por favor… lo que haces es horrible- no es cierto cariño, lo que hago es arte en su estado más puro- ¡no puedes jugar a ser dios!- no juego cariño, lo soy-

Me tomó de la muñeca y me arrastro hasta la puerta sin un poco de delicadeza, Leonardo e Ismael esperaban en el pasillo, Joshua los observo fijamente y me arrojo al piso con fuerza. Le dirigió una mirada a Leonardo.

-escucha muy bien, quiero que me traigas a Eliot, al estúpido de su hermano y a Caín- si señor…- llévalos al subterráneo, camelia y yo los esperaremos ahí- Joshua me levanto del cabello con fuerza y golpeo mi cabeza contra la pared, intente liberarme pero era inútil, volvió a hacerlo pero fue detenido, me sorprendí al ver que Leonardo lo tomaba por la muñeca- ¿Qué demonios haces?- por favor, ya no la lastime, es una mujer- Joshua me soltó riéndose y tomó a Leonardo por el cuello colocándolo contra la pared-¿y desde cuando un moustro como tu tiene moral?, es lo más divertido que he escuchado, harás lo que te ordene, eres mi juguete y te usare como me plazca-

Ismael lo iba a golpear pero Joshua lo detuvo sonriendo, lo lanzo contra la pared enojado y golpeo su estomago sin dejar de sostener a Leonardo por el cuello. La actitud de Joshua me repugnaba, me levante revisando mis bolsillos y clave un lápiz en su muslo derecho, lo gire sin dejar de presionarlo haciéndolo gritar, Joshua soltó a ambos hombres y se volteo a mí sonriendo.

-vaya, vaya, te estás comportando como una chica muy mala camelia- Joshua…- no debiste hacerlo tesoro- comencé a retroceder asustada, Leonardo alzo la vista adolorido- ¡huye camelia!- no…- ¡huye!-

Me levante rápidamente y corrí por el pasillo, podía oír la risa de Joshua tras de mí, era cosa de tiempo para que me alcanzara y me volviera a lastimar. Entre en la primera puerta que encontré y baje las escaleras a lo que parecía ser un sótano, corrí a través del largo pasillo hasta dar con una puerta de metal, la abrí rápidamente y la cerré suspirando aliviada, esto me duro muy poco porque cuando la alce la vista el terror me paralizo y la voz de Joshua invadió mis oídos.

-abre la puerta cariño, no hagas que tu castigo sea peor- … … …- creo que ya lo has visto, es mi laboratorio privado, muy pronto todos ellos no serán más que mis muñecos- estás enfermo…- logre pronunciar apenas- piensa lo que quieras cariño, esto es arte, ¡crear vida es arte!-

Me levante caminando por el amplio lugar, una luz blanca en el techo se encargaba de iluminar toda la habitación. Había unos extraños tubos de vidrio con un líquido verde claro en su interior, dentro se veían cosas extrañas, primero había partes de humanos, corazones, pulmones, riñones, pero la complejidad iba avanzando. Había piernas, torsos, cabeza, manos y brazos, algo al final del corredor llamo mi atención, había unos cuantos escalones y una especie de ataúd de cemento, avance lentamente, un leve temblor comenzó en mis manos y lentamente se expandió por todo mi cuerpo. Quede frente al ataúd de cemento que se encontraba abierto y lo mire sin creerlo, caía de rodillas llevándome las manos a la cabeza y gritando, la persona dentro del ataúd… era yo…

Caín dirigió su mirada hacia el pasillo y aparto a Kaname, este lo observo fijamente tomando sus manos despacio. Dio pequeños besos en su frente y le sonrió de una manera cálida.

-no quiero perderte Caín… no de nuevo- por favor ya basta…- prométeme que te quedaras a mi lado- ya… no soy la persona que conociste- eres una mujer, mi linda princesita, eso no cambiara- ¿aun… me amas?- si- Kaname- ¿y tú?- yo…- Caín se incorporo de la cama- ¿Qué ocurre cariño?- camelia, puedo oír su voz- vamos por ella- Kaname- luego terminaremos nuestra conversación princesita- si…-

Ambos corrieron por el pasillo, dos siluetas los hicieron detenerse, Kaname se coloco en guardia sacando una pistola, Caín observo a ambos hombres y le dedico una mirada a Kaname para que guardara su arma.

-Caín- ¿Qué quieren?- Leonardo le ayudaba a Ismael a mantenerse de pie- no queremos pelear contra ustedes, no tenemos razones para hacerlo- Ismael observo a Kaname- ese bastardo- el aludido sonrió- hola Ismael, no has cambiado en nada- maldito- basta Ismael, es hora de irnos- pero Leonardo- ya me canse de esto, aun si nos convertimos en fugitivos es mejor que estar aquí- si…- Kaname sonrió- así que al fin se decidieron, me alegra oírlo- cállate bastardo- bien pequeñito, yo puedo ayudarlos- tú…- por supuesto, tengo contactos en todo el mundo, no será difícil encontrarles un lugar donde puedan estar tranquilos- ¿y porque lo harías?- no me interesa pelear con ustedes y ya tengo lo que buscaba- abrazo a Caín, Leonardo sonrió- así que al fin aceptaras que eres una mujer y no puedes cambiarlo- cállate- lo siento, no peleare con una señorita- Caín se sonrojo y avanzo por el pasillo- espera- ¿Qué quieres ahora?- si buscas a camelia esta en el subterráneo, Joshua fue tras ella… no pudimos detenerlo- Leonardo- déjennos ayudarles- ¿Por qué?- de otra manera no podremos aceptar la ayuda de Kaname además… conocemos muy bien este lugar- bien, gracias chicos- hay que avisarles a Liam y Eliot- si-

Aguardaron al final del pasillo del lado izquierdo, Eliot y Liam llegaron rápidamente, ambos cargaban una pistola en su mano lo que indicaba que se habían encontrado con algunos obstáculos. Kaname los puso al tanto de la situación antes de que Eliot e Ismael comenzaran a pelear debido a los acontecimientos en su encuentro anterior. Bajaron las escaleras que conducían al subterráneo y Leonardo se encargo de abrir la puerta de metal, el lugar era amplio y había varios tubos de vidrio con distintas cosas dentro, todas partes de humanos.

Eliot observo al final de la habitación divisando las escaleras y el ataúd de cemento, se quedo inmóvil al ver quien estaba dentro pero su sorpresa fue mayúscula cuando escucho una voz familiar y se volteo. Joshua sostenía a camelia en sus brazos mientras se reía.

-al fin lo han descubierto- ¿Qué… significa esto?...- es muy simple mi muñequito, ese cadáver que está ahí dentro es la verdadera camelia, está cosita linda, no es más que una preciosa muñeca creada de manera artificial- ¿Qué…?- clonación y manipulación genética, sorprendente ¿verdad?-