La joven que se encontraba recostada sobre la cama dirigió su mirada a mí, un intenso miedo me invadió pero antes de que pudiera reaccionar y huir del lugar, ella ya se encontraba frente a mí, intente apartarla pero sorpresivamente tenía más fuerza que yo.
-tú debes ser…- disculpa… yo no…- necesito tu ayuda- ¿ayuda?, primero hay que curar tu herida- la joven observo que su pecho aun sangraba- claro, eso es fácil-
Se irguió frente a mí, midió un par de centímetros menos que yo, así que me tomo por la nuca y me forzó a inclinarme a su altura, iba a protestar pero cuando sus labios se sellaron sobre los míos mi mente no elaboraba ningún pensamiento, ninguna orden, poco a poco mis ojos comenzaron a cerrarse, al mismo tiempo que percibía como su lengua jugaba con la mía y al cabo de unos segundos todo se volvió negro.
Cuando volví a despertar ya era de noche distinguí que había una silueta junto a la ventana, intente incorporarme pero caí sobre la cama nuevamente la sombra se acerco a mí y pude ver que se trataba de Joshua, me observaba muy preocupado y se sentó junto a mí.
-¿te sientes mejor?- si… ¿Qué ocurrió?- me quede preocupado y vine a verte, entonces te encontré desmayado sobre la cama- ya veo…- el hombre suspiro aliviado- no vuelvas a asustarme así… si te sentías mal debiste decírmelo- perdón… es que…- no había nadie más que nosotros dos en la habitación- no es nada…- te traeré la comida- no es necesario yo puedo ir- ni pensarlo- Joshua- soy tu hermano mayor así que déjame que te consienta- solté una risita ante sus palabras- gracias- por cierto, ¿esto es tuyo?-
Se levanto y se inclino recogiendo algo del suelo, sostenía a un pequeño gatito blanco en sus manos. Lo mire extrañado, los ojos del animal eran plateados igual que los de esa extraña mujer… que me besó… Joshua sonrió y acaricio la cabeza del gatito, este comenzó ronronear y trepo por sus brazos hasta quedar en su hombro derecho.
-es un gatito muy lindo parece que no tiene casa, así que lo conservaremos- pero es un hotel… no se permiten mascotas- cierto pero nadie puede prohibirle nada al jefe- ¿jefe?- esté hotel es mío- ¿Qué…?- actualmente soy el heredero de una cadena de hoteles a nivel nacional, mi abuelo, por parte de mamá me dejo a cargo del negocio- ya veo, es sorprendente- Joshua se rio- no es para tanto, prefiero mil veces que hubiera sido cariñoso conmigo a que me dejara a cargo de todo- Joshua…- lo siento, no quiero deprimirte con mi historia, te traeré la comida y regreso, cuida al gatito por favor- si-
Joshua lo dejo sobre mi regazo y salió de la habitación sonriendo. Aunque recién nos conocíamos, estaba siendo muy amable conmigo, como un hermano mayor… el gatito me observo fijamente y subió por mi brazo derecho hasta quedar en mi hombro, lamio mi mejilla despacio. En esos precisos momentos escuche una voz, la misma de esa mujer.
-gracias por ayudarme- observe a mi alrededor asustado, solo estábamos el gatito y yo- me alegra que al fin nos hayamos encontrados-
Me iba a levantar para salir huyendo pero unos pasos detuvieron mi accionar, Joshua regreso con la bandeja lista, aparto al gatito con cuidado, quien trepo hasta quedar nuevamente en su hombro.
-come Joshua, luego puedes descansar- gracias Sebastián- el mayor acaricio la cabeza del gatito- tu también debes tener hambre precioso, vamos a la cocina y te daré un poco de pescado y leche- el gatito lamio su mejilla- espérame un momento Joshua- si-
Lo observe salir de la habitación y comencé a probar mi comida. Esta muy buena pero aun había algo que no comprendía, la aparición de esa mujer, ese extraño gato, deseaba obtener muchas respuestas pero no sabía cómo preguntar. Al cabo de unos minutos Joshua regreso a mi lado sonriendo, lo mire fijamente y su mano me llamo la atención.
-¿Qué te ocurrió?- no es nada, el gatito se enojo bastante cuando lo baje de mi hombro- sonreí- creo que es gata- ya veo, eso lo explica todo- sonrió observándome y se sentó junto a mi- ¿te gusta?- si, gracias Sebastián- sé que todo esto debe ser extraño y confuso para ti- asentí- puedes preguntarme lo que quieras- Joshua… mañana… me puedes llevar a ver a mis padres- claro- Joshua bajo la vista- hay algo más que debes saber- ¿Qué cosa?- bueno… unas personas se enteraron de que has despertado y vendrán mañana a verte- ¿Quiénes?- tu familia, tíos… primos y… tu abuelo- su mirada se torno muy triste- ¿ocurre algo Sebastián?- no… les dije que vinieran a la hora de almuerzo, si a ti no te molesta- no… no los recuerdo mucho pero creo que deben estar muy preocupados- así es, solo desean verte-
Me seguía intrigando porque Sebastián tenía esa mirada tan miserable cada vez que mencionaba a alguien de mi familia. Deseaba preguntar pero preferí callar, de seguro no era un tema que quisiera hablar con un extraño como yo. Termine mi comida y Sebastián dejo la bandeja en el velador, me abrigo bien con las tapas y beso mi frente.
-tienes que descansar- Sebastián- dime- tú… ¿tienes más familia?- se hizo un silencio sepulcral que duro unos segundos- no… solo tú- y… ¿la familia de tu mamá…?- Sebastián desvió la vista dándome la espalda- perdóname Joshua pero no quiero hablar de ello- si, perdóname por preguntar- no tienes que disculparte- se volteo dedicándome una sonrisa- tienes todo el derecho a preguntar lo que desees saber- gracias…- ahora duerme-
Se levanto de la cama y salió cerrando la puerta. Me quede unos segundos mirando hacia el techo y poco a poco fui quedándome dormido.
Cuando volví a despertarme me encontraba solo en la gran habitación, tomé una ducha que me ayudo a recuperarme y me vestía hiendo por el pasillo hasta el cuarto de Joshua, golpee un par de veces pero al no recibir contestación entre. Vi al gatito durmiendo sobre el sillón del living, avance en silencio hasta el cuarto de Sebastián, al oír su voz me detuve, estaba hablando por teléfono.
-ya les dije que si, Joshua también quiere verlos- frunció el ceño levemente, su voz era muy fría y cortante- me importa una mierda lo que quieran, Joshua se quedara conmigo, nunca lo dejaría con unos buitres como ustedes- se quedo en silencio unos minutos, su expresión era triste- los esperamos a las doce, no lleguen tarde-
Termino diciendo mientras dejaba el teléfono a un lado de la cama y golpeo la pared molesto. Algo muy malo tenía que haber ocurrido para que reaccionara de esa manera. Eso me hizo cuestionarme seriamente si era buena idea que mi familia viniera a verme, no me gustaba ver a Sebastián triste, el ha sido muy bueno conmigo pero… también siento curiosidad por saber que ocurre.
Ando un poco corrida con la lectura, pero me toco trabajar ayer hasta la 1 de la mañana, juro que un dia me voy a sentar a leer la legislacion laboral... porque me parece insolito,y se me olvido timbrar la targeta al salir, asi que quizas no me crean que cumpli el horario... :-(
ResponderEliminarCon respecto a tu Historia Miauuuuuuuu rrrrrrrrrrrrrrrrrr, prrrrrrrrrrrrrrr miauuuuuuuuuuu miuuu, yo me hubiera puesto de lleno en su cama, como este instruso que tengo aca, que no pierde ocacion de hacerlo.... Mis felicitaciones Alice, a ver cuando nos vemos, ya te hecho de menos... Nos vemos
Un besote.
jajaja, es muy muy muy dificil sacar el pelo de gato de la cama XD, yo tambien lo se por experiencia propia y mas aun de la ropa XD, gracias por leerlo. Gracias por leerme. y creo que es más probable que nos veamos en la tarde, comenzando la noche, hoy viajo de regreso XD. nos vemos besos :) y Animo aunque cueste!!!! :D
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