Tu nombre es ¿.....? (3)

Ambos sujetos desaparecieron del lugar dejándonos solos. Ninguno de nosotros pronuncio palabra alguna durante unos minutos, el primero en romper el silencio fue el chico de expresión implacable.

-es mejor que comencemos a caminar, debemos llegar a la torre y- ¿Qué haremos después?- pregunto la chica de cabello anaranjado- ni siquiera sabemos si esos sujeto o lo que sean, nos dijeron la verdad- teniendo en cuenta las circunstancias no hay mucho que objetar- replico el chico de lentes que permanecía a mi lado- es cierto lo mejor es que lleguemos a la torre y luego veremos que hacer- el chico rubio se volteo furioso- ¡no les sigamos el juego!, solo quieren asustarnos, esos malditos enfermos- la chica de cabello negro dio unos sollozos antes de hablar- no quiero morir aquí… no quiero morir- ¡cállate de una vez!- respondió el rubio- cuidado con tus palabras, sin importar la situación en que nos encontremos, esa no es manera de tratar a una mujer- refuto el chico de ojos azules- ¡una mierda! ¿Acaso no entiendes en la situación que estamos?- no conseguirás nada alterándote- por favor basta los dos- replique con una voz firme y me levante- antes que vayamos a la torre hay que elegir nuestras armas, no sabemos que hay en ese bosque y esos sujetos, khael y Yell dijeron que nos mataran, si permanecemos juntos- ¡basta de discursitos baratos!- no llegaremos a ningún acuerdo- dijo el chico sin cambiar su expresión- cada uno ira por el camino que desee- ¿y las llaves y Alice?- no podemos cooperar si peleamos, es lo mejor, nos reuniremos en la torre, cada uno escoja los medios por los que llegara-

Y dicho esto se interno en el bosque desapareciendo en él, el siguiente en seguirle fue el rubio y finalmente la chica de cabello negro y el joven de ojos azules. Suspire resignada y observo a mis dos acompañante, la chica de cabello anaranjado se acerco a mí.

-yo si quiero que vayamos en grupo, no sabemos los peligros, es riesgoso separarnos- si- yo también iré con ustedes- dijo el chico de lentes, sonreí más tranquila- gracias… lo primero será alcanzar a los demás- pero ellos no quieren ayudarnos- lo sé pero para salir de aquí necesitamos trabajar en equipo, cooperación- el chico de lentes asintió- muy cierto, vamos, ese hombre dijo que el escenario cambia cada doce horas, hay que darnos prisa- si-

Los tres nos internamos en el bosque, a medida que avanzábamos se hizo un silencio sepulcral, me sorprendí al notar que la chica de cabello anaranjado se aferraba a mí con cierta fuerza mientras caminábamos.

-¿estás bien?- si… es que… este silencio me asusta…- tranquila, estamos los tres juntos no ocurrirá nada- si…- ¿vas a la universidad?- si…- ¿en qué carrera?- enfermería- vaya, eso es sorprendente- la joven me miro sonriendo- gracias- déjame adivinar, vas en tercer año- si, ¿Cómo lo supiste?- tengo una buena intuición- ¿y tú que estudias?- estoy en segundo, en la carrera de bachillerato en humanidades- suena interesante, ¿en qué te especializaras?- en literatura- ¿escribes?- si pero no soy la gran cosa- ¿Qué genero escribes?- me voltee al chico de lentes- novelas policiales y también románticas- que lindo- sentí como la chica de cabello naranjo aflojaba su agarre de mi brazo- ¿has publicado algo?- no… solo soy una novata, aun me falta mucho por mejorar- aun así eres sorprendente- gracias- sonreí- ¿y tú que estudias?- artes- ambas nos miramos y luego lo observamos a él- ¿eres pintor?- si, aunque voy en segundo año ya tengo algunas exposiciones programas- vaya- acote sorprendida- la verdad es que no me gusta, solo lo estudio porque mi padre odia el arte- pude notar un cierto grado de tristeza en su mirada pero preferí guardar silencio. No quería arruinarlo- la salida- dijo la chica de cabello anaranjado, al parecer también percibió lo pesado del ambiente y cambio el tema- al fin-

Nos detuvimos al ver que un gran rio nos impedía pasar, las aguas eran de un inquietante color verde esmeralda, y unos puntos rojos brillaban en su fondo. Recorrimos la orilla hasta encontrar un tronco que podíamos usar como puente para atravesar al otro lado. Nos miramos entre nosotros y el chico de lentes tomó una piedra y la lanzo al agua, no ocurrió nada así que repitió la misma acción unas diez veces y luego se volteo a nosotras.

-vamos a cruzar- pero… no se ve muy seguro- tengo un mal presentimiento- escuchen haremos lo siguiente, primero, necesito que me digan un nombre para referirme a ustedes- si- la chica de cabello anaranjado lo pensó un poco- pueden decirme Nicole- bien, yo seré Eliot ¿y tú?- me observo fijamente- Anna- muy bien, yo cruzare primero, y luego ustedes- lo medite unos segundos y alce la vista- podríamos usar una cuerda- ¿Qué?- ese tronco no se ve muy seguro y caer al rio… no sabemos que hay ahí- entiendo tu punto, me parece una buena idea- yo lo hare- dijo Nicole- recuerda que khael dijo que debíamos pensar en nuestra arma y aparecería sola- si- tiene que ser una cuerda larga y firme- entiendo-

Cerró los ojos y nosotros guardamos silencio para que pudiera concentrarse, me sorprendí al ver que en su mano sostenía una cuerda negra. Eliot probo su resistencia y el largo asintiendo.

-es perfecta, muy bien Nicole- gracias- sonrió- ahora, yo seré el primer en cruzar, necesito que ambas sujeten el otro extremo con fuerza- ¿y si lo atamos a un árbol?- pregunto Nicole- no me parece una buena opción, míralos, ese color de por si es extraño mejor no acercarnos- si…- cuando llegue al otro extremo una de ustedes sostendrá la cuerda y la otra atravesara, yo les ayudare del otro lado a mantener la cuerda tensa- si…-

Observe como Eliot se ataba la cuerda con fuerza alrededor de la cintura y luego comenzó a caminar por sobre el tronco fijando su vista del otro lado, el rio tenía un ancho de unos quince metros. Ambas sosteníamos la cuerda con fuerza. Suspire más aliviada al ver que Eliot había conseguido atravesar el rio sano y salvo. Sostuve la cuerda con fuerza y observe a Nicole.

-ve- si…-

Se sostuvo fuertemente a la soga y comenzó de a poco a atravesar el rio, en algunos momentos tuve que contener la respiración, estuvo a punto de caer al lago pero logro recobrar el equilibrio, estaba en el tramo final cuando un extraño brillo rojizo salió del agua y la empujo provocando que cayera, las aguas la arrastraron rio abajo y la llevaban hacia el centro del rio. Observe a Eliot preocupada y me ate la cuerda a la cintura con fuerza.

-¡sostén firmemente la cuerda, iré por ella!-

Me hizo un gesto de acuerdo y salte al agua sin pensarlo dos veces. Cuando logre salir a flote mi primera impresión era una extraña sensación de calidez, comencé a nadar hacia Nicole, que pataleaba y a duras penas se mantenía a flote. Me estaba acercando cuando sentí que algo rodeaba mi pie con fuerza y me tiraba hacia abajo. Abrí los ojos bajo el agua y me percate de dos cosas, que el fondo era muy claro, a diferencia de la superficie y dos, que se encontraba repleto de unas especies de enredaderas azules que se enrollaban en mis piernas y continuaban subiendo, note que Nicole estaba en la misma situación que yo, era cosa de tiempo para que ambas nos ahogáramos, sentí un tirón en la cuerda y reaccione, aun no había escogido mi arma y lo único que podía servirme en este momento era un cuchillo, uno muy filoso y capaz de cortar cualquier cosa. Sentí como se materializaba en mi mano derecha y corte las enredaderas de mis pies y fui a socorrer a Nicole. Logre sacarnos a flote y comencé a nadar hacia Eliot rápidamente, ahora estaba muy agradecida de haber tomada clases de natación cuando estaba en la enseñanza media. Eliot nos ayudo a subir, solté el cuchillo al mismo tiempo que Nicole me abrazaba con fuerza y susurraba un “gracias” en mi oído.

Observe a Eliot que esbozo una pequeña sonrisa al mirarnos y acaricio mi cabeza.

-eso estuvo cerca-

Nicole nos observo y comenzamos a reírnos. No había nada gracioso, estuvimos a punto de morir, quizás fueron los nerviosos y el susto del momento. El camino desde ahora no sería nada fácil, en ese momento comprendí que el hecho de llegar vivos a la torre ya era toda una hazaña y parte del premio en sí.