-¡Camila!- ¡Paula!- ¡Tamara!-
Gritaron al mismo tiempo los tres jóvenes, se observaron entre ellos con una mueca parecida a una sonrisa y suspiraron. Nuevamente habían errado los nombres. Decidieron probar una vez más.
-¡Mónica!- ¡Camila!- ¡Angélica!-
Se instalo un incomodo silencio en el lugar, pasados unos minutos los tres jóvenes decidieron volver a intentarlo. Ya llevaban un siglo y medio así, un intento más no importaría a estas alturas ¿verdad?
Déjame aclararte lo que está ocurriendo pero luego no me culpes si el nombre que terminan mencionando es el tuyo.
Este juego lleva realizándose desde el inicio de la raza humana. Durante los días de oscuridad cuando una parte del planeta se cubrió de sombras y tinieblas mezcladas con una espesa niebla roja, ocurrió algo impensable e irreconocible. Nadie conoce el origen exacto, de hecho nadie sabe de su origen actual, solo los conocen aquellos que son llamados para el “juego” y el hecho de que nadie tenga conocimiento de esto es porque ninguno de los participantes regresa con vida.
Enfoquémonos en sus creadores, tres jóvenes, en apariencia (ya que su verdadera esencia quien sabe que sea) y recalco esa última parte ya que solo el cuerpo parece tener un deje de algo humano. Quizás alguna vez fueron personas, como tú o yo pero ahora han cambiado y no sabría decirte con exactitud que son, ¿demonios? ¿Ángeles? ¿Espectros? ¿Sombras? ¿Brujos? ¿Sirvientes de la oscuridad?, la respuesta a todo eso es un simple “no lo sé”
Comenzare por orden para que puedas identificarlos si algún día eres llamado.
El más alto de los tres, alrededor de unos 1,83cm, de figura atlética y piel tan blanca como el marfil, cabellos oscuros como el abismo más profundo que puedas imaginar, lo importante es su rostro, sus orbes son rojas, más rojas que las llamas del infierno y el contorno de sus ojos están delineados con un circulo negro de aproximadamente un centímetro de ancho, pero esto no es lo más inquietante sino su boca, sus labios son del mismo rojo que sus ojos, resaltando de manera inquietante en su piel de marfil y de sus labios semi abiertos escurre una delgada línea de sangre (pero lo suficientemente ancha para reconocerla) que va por su cuello hasta perderse entre la camisa blanca que usa, la cual está cubierta de manchones de sangre (ignoro si será de él).
El segundo de ellos, estatura media, me atrevería a decir 1,70cm aproximadamente, figura elegante y con un cierto aire de ser alguien importante. Su piel es tan pálida y blanca como el sujeto más alto que acabo de describir. Pero no te dejes engañar si lo ves de espalda porque su rostro, dios… tiene una venda negra que cubre sus ojos por completo y rodea su cabeza, debes estar pensando que no tiene nada de inquietante o perturbador pero no es cierto, su boca… mejor dicho, su boca no es más que una línea de hilo de cocer negro en forma de pequeños triángulos (sin la base) que se prolongan unos centímetros y que simulan una sonrisa. Pero no te confíes porque tiene una voz sepulcral que resuena en tu cabeza y es capaz de paralizarte del miedo.
Y el tercero, el más bajo de los tres, alrededor de 1,65cm, figura atlético y piel tan blanca como el marfil, de cuerpo similar a un humano pero de sus manos, los dedos tienen prolongaciones similares a unas garras, afiladas y listas para rebanar la carne de sus víctimas. De los tres, sin duda este es el que puede resultar menos inquietante, ya que mantiene su rostro cubierto con una máscara de un zorro blanco pero de espalda se puede apreciar perfectamente el color rojizo de sus cabellos y lo pálido de su piel (que queda expuesta en el cuello y en las manos).
Los tres juntos son las cosas más horrorosas que he visto, si te encuentras con ellos y eres llamado para su juego, ten esto muy claro “ya estás muerto”. El juego es simple cuando los tres coincidan en un nombre… es mejor que reces, para que no sea el tuyo, ni resultes involucrado en esto.
Quizás la pregunta que ronda por tu cabeza es ¿Cómo sé todo esto?, es fácil, yo fui una de las que llamaron para su último juego.
-¡Alice!-¡Alice!-¡Alice!-
Los tres jóvenes se miraron de una manera cómplice, y dos de ellos esbozaron una sonrisa que asustaría al guerrero más valiente. Se levantaron del lugar, en el cual habían permanecido por siglos y caminaron unos pasos hasta llegar al claro del bosque. El hombre de la boca cocida asintió notoriamente feliz.
-ya saben que hacer- no te preocupes khael- respondió el joven con la sangre cayendo por sus labios- hemos esperado demasiado, no lo arruinaremos- eso espero Yell, no lo arruines como la última vez- por favor ya ha pasado un siglo de eso, deja de restregármelo en la cara- dejen de pelear- pronuncio el joven con la máscara de zorro blanco- ya kitsune, encárgate de tu parte, traeremos seis, está vez te toca a ti ser el séptimo- si- entonces- sonrió Yell, con la sangre aun cayendo por sus labios- que comience el juego-
holaaa alice he sido una mala lectora pero realmente no habia tenido el tiempo de pasarme poco a poc e leedio un poco y alfin termino , si estava estresada me ha relado simplemente es genial leerte refrescante y divertido saludos
ResponderEliminarInteresante juego jajajaj....
ResponderEliminarPero me da miedito...
un besote....
Hummm....¿En que consistirá el juego?
ResponderEliminarTengo la impresión de que pronto lo sabremos, y que no será nada divertido.
Al menos para quién lo juegue, pues para nosotros será una delicia leerlo como para ti escribirlo.