Yo tengo un secreto que nadie más conoce, quizás esa no sea la palabra de definirlo, más que un secreto es una sed, si… una sed tan grande que solo puedo controlarla hasta cierto punto. No miento, por favor confía en mí… o al menos trata de creerme, yo sé que esto está mal pero dime… cuando tienes sed ¿no es normal tratar de satisfacerla? Claro que si…
Todo indicaba que sería solo un día más pero vaya error que estaba cometiendo. En cuanto mis ojos se posaron en ti simplemente pensé “él es”. Era consciente de las armas que tengo a favor y la que nunca fallaría. Me acerque a él y esboce una de mis sonrisas.
-hola, me llamo Alice Smith, bienvenido a la compañía- el me dedico una sonrisa igual de resplandeciente, ¡que confusión me causa este chico!- gracias, soy Jack napell, gusto en conocerte- ¿Cómo te ha ido Jack?- muy bien, todos han sido muy amables conmigo- que bien, si tienes cualquier duda puedes preguntarme, te ayudare encantada- gracias-
Regrese a mi escritorio y pude notar como Eliot, el jefe del departamento, me dirigía una mirada de pocos amigos. Esto va a ponerse muy interesante.
Continúe con mis acercamientos casuales y al cabo de tres días ya lo tenía en mi hechizo, continuaba pensando que algo extraño había en ese chico pero ya que, mientras pudiera saciar mi sed, lo demás no me importa.
Lo vi descender las escaleras y acercarse a mí, yo permanecía junto a su auto, al fin tendría lo que tanto anhelo, ya era hora… lo abrace fuertemente y él no opuso resistencia, que sencillo seria todo esto. Me tomó por la cintura sin contemplaciones y con una fuerza que supera la mía con creces me coloco contra la pared del estacionamiento, deslizo su mano hasta mi cuello y profundizo el besó, parecía una bestia salvaje que solo sigue sus instintos… delicioso… sí que voy a disfrutar de esto.
Ya era hora… intento librarme pero sostenía con mucha fuerza mis muñecas, inmovilizándome por completo. Forcejee un poco pero era inútil, vi como los colmillos se asomaban en su boca, por un momento mis ojos solo demostraron terror en su estado puro. Se acerco a mi cuello con la intención de beber el preciado líquido que corría por mis venas, comencé a reírme, cosa que lo desconcertó por completo, me miro molesto.
-¿acaso no lo entiendes Alice?, eres mía, no sabes las ganas que tengo de hacer esto- ¿en serio?- sonreí coquetamente- si te portas bien y me satisfaces pensare en conservarte- que lindo, vaya honor que me darás pero- ¿pero qué?- no soy la perra de nadie, es al revés, yo seré quien te conserve- ¿Qué?- buenas noches-
Cayó pesadamente al suelo y estire mis muñecas moviéndolas de un lado a otro, Jack sí que tenía fuerza, observe a la silueta frente a mí y lo bese sonriendo.
-al fin llegas- siento el retraso, quería saber tu respuesta- ¿respuesta?- él quería conservarte- no bromees tesoro, ya lo dije, no soy la perra de nadie- lo sé, mi querida Alice- se arrodillo frente a mí- pero en cambio yo soy tu perro, puedes usarme como desees, yo solo te serviré a ti, mi preciosa- que lindo de tu parte Eliot, ¿no me digas que estás celoso?- un poco- precioso- lo abrace sonriendo- eres mi favorito, ahora… hay algo que puedes hacer por mi- ¿Qué cosa?- tengo sed-
Nos dedicamos una sonrisa cómplice y devore su cuello aspirando su aroma, saboreando su sangre y tomando su esencia, sin duda Eliot es mi droga. Me detuve al observar lo pálido que se encontraba.
-¿estás bien cariño?- si… ¿Qué harás con Jack?, no podemos dejar a un vampiro novato dando vueltas por la empresa- tranquilo, yo me encargare de su educación, siempre quise un hijo- como desees- ¿hace cuanto que no comes cariño?- dos días- muy mal, cuando tienes sed te colocas muy agresivo- está bien, mañana llegara una nueva secretaria- esboce una sonrisa- entonces te tocara a ti jugar a la víctima inocente-
Nos observamos sonriendo y mordí mi labio inferior haciéndolo sangrar, juntamos nuestras bocas en un beso y no nos separamos hasta el amanecer.
Cuatro días han pasado desde que adopte a Eliot bajo mi cuidado, le he enseñado todo lo que sé y para mi sorpresa es un excelente aprendiz. Me acerque a su escritorio sonriendo y me incline hasta susurrarle.
-ya es hora, estela es toda tuya- Alice- se acaba de unir a la empresa, merece una cálida bienvenida, ¿no lo crees?- claro- sé un caballero y ve a acompañarla-
Eliot obedeció mi orden de inmediato y se acerco a la pelirroja que lo observo sonriendo, hasta aquí podía oler sus hormonas alborotadas, esto sí que sería interesante. Sentí una mano en mi hombre y sonreí.
-que mirada tan peligrosa- Eliot- ¿te encuentras bien?- no- Alice- tengo sed de…-
SImplemente guauuuuuuuuuuuuuuu me encanto....el resto te lo digo a ti,... magistral
ResponderEliminarBesitos
MAGISTRAL, INCREIBLE, BRUTAL
ResponderEliminarno tengo palabras, realmente es impresionante, no esperaba lo d Jack.
Definitivamente no puedo describirlo. Ésto hay que leerlo.
Buen trabajo :)